Con la tecnología de Blogger.
jueves, 5 de septiembre de 2013
Los profesionales del comercio especializado pueden asumir algunas opciones para sobrevivir en unos momentos difíciles por la situación económica actual.

Estamos en crisis. Antes de la crisis, las mascotas, y sobre todo los perros, suponían un gasto para sus dueños de unos cien euros de media al mes. Hoy en día se ha rebajado. Los dueños reducen gastos en el cuidado y la alimentación de su mascota. El cálculo es simple: necesito más clientes para facturar lo mismo. No te estoy descubriendo nada nuevo.

No sé si el futuro será de colores, más o menos gris o directamente negro pero, como dijo el escritor estadounidense Marc Twain, “es donde vamos a pasar el resto de nuestra vida”.

Las grandes cifras se nos escapan a todos, pero en el día a día tal vez podamos hacer algo. Cuando naufragas en una isla desierta hay dos opciones. Puedes comer bayas, dormir y aprender a subsistir; la otra, más productiva, consiste en pescar, hacer fuego, construir un refugio y hacerte más fuerte mientras sobrevives.


Opciones

La gente tendrá que obtener prácticamente lo mismo por menos dinero. Correcto. Luego… está claro que debo bajar los precios. Incorrecto. No bajes los precios. El precio siempre es importante, no siempre es lo más importante y nunca es lo único importante. Incluso en tiempos de crisis.

Al menos plantéate antes otras opciones:

Crea una tarjeta donde pongas un sello por cada saco de comida que te compre el cliente y por cada cuatro o cinco (haz tus números) regálale uno. Ya solo la palabra regalo suena mejor que descuento, y por otro lado fidelizas a esa persona. Además obtendrá más descuento el que más te compra. ¿Qué ventajas tiene para ti bajarle el precio al cliente de paso?
Puedes entregar una tarjeta con un porcentaje de descuento permanente a tus clientes VIP. Haz promociones de una semana a final de mes… Las promociones son efectivas si duran poco tiempo.

A los clientes ponlos a trabajar para ti: ten un detalle con ellos por cada nuevo cliente que traigan a tu tienda de mascotas. Además, una bajada de precios lineal y sin ningún criterio se olvidará en una semana o dos.
Las emociones mandan

La compra es una experiencia emocional por más que, una vez la hemos hecho, nos esforcemos en justificarla racionalmente. Y a veces ni lo intentamos.

Una atención al cliente cuidada y de calidad es lo que te diferencia hasta hacerte único y la mejor arma con la que cuenta tu tienda… y además es prácticamente gratis. Sé que ya lo haces, pero puedes darle una vuelta, porque todo se puede mejorar.

Ya te he hablado en alguna ocasión en estas mismas páginas de Paco, el propietario de mi tienda de mascotas habitual, y de Gala, mi gata. Pues bien, Gala tiene tendencia al sobrepeso debido a la esterilización. Está gorda.

Cambiamos a Royal Canin Esterilised 37. Hemos establecido horarios fijos de comida que hemos reflejado en una tabla, vamos a reducir la ración alimentaria paulatinamente, llevaremos un proceso de seguimiento a rajatabla. No voy a cansarte con temas que dominas mejor que yo.

Cambiamos, hemos, vamos, llevaremos… nosotros, juntos. A lo largo del tiempo Paco y yo nos hemos hecho amigos. No todos los clientes podrán ser amigos, pero con todos puedes establecer un cierto grado de simpatía mutua que lleve a ese nosotros.

En una gran superficie, ¿puedo hacerme amigo, o tener cierto grado de simpatía a... esto… bueno, tú ya me entiendes, a…? Seamos justos, tengo un amigo, bastante fiable, que sostiene que no solo existen, sino que una vez vio un vendedor entre los lineales de una gran superficie.

Intenta que cada cliente se sienta único y especial, y deja que se peleen por el precio los que no pueden hacer otra cosa…

0 comentarios:

Publicar un comentario

Popular Posts